jueves, 8 de octubre de 2009

El peso de los galones.

En menuda mierda me he metido. No era suficiente con la sanguijuela de Márquez suelta por ahí (a la mierda su graduación), sino que para mayor marrón Gabriel quiere dejar los galones de cabo. Dice que es lo mejor para la compañía, que nos ha causado daño el seguirle nosotros, que por su culpa estámos así de jodidos porque se ha dejado llevar o algo así. ¡¿Quién cojones le ha metido esas ideas en la cabeza?! ¿Acaso cuando Márquez desapareció se metió en su cabeza y ahora nuestro peor enemigo es Gabriel intentando dejar el cargo que nos ha mantenido lejos de una bolsa de cadáveres?
Lo peor es que todos estamos de acuerdo en que siga siéndolo, menos él, y lo que nosotros digamos, va a misa.
Espera espera, que la lluvia de mierda no acaba aquí. A quien le tocaría cargar con los galones en el muy deseperado caso de que Gabriel no recapacite (espero que eso no pase joder), es a mí, al menda. Si, yo. Sé que no tenemos razones para estar cuerdos, pero ¿Yo siendo cabo de la Compañía? ¿Un tirado de la calle que lo más cerca que ha estado de eso fue organizar a los carteristas del metro de Madrid, o liderar alguna pelea callejera contra niñatos de extremaderecha?
Lo hemos intentado de todas las maneras posible (o eso creo) ni siquiera lo ha conseguido Mariam argumentándole a Gabriel que no me veía en el cargo (no se lo reprocho, sé que lo hace con buena intención, ademas qué coño ¡Tiene razón!) Ella se esfuerza, se nota que hace acopio de voluntad para hablar e intentar convencerlo. Si alguien puede convencer y ayudar a Gabriel, estoy seguro de que esa es Mariam.
Diego parece que reacciona e intenta ayudar. Pero a la misma vez intenta como mantenerse al margen, como si lo que pudiera decir no fuese a cambiar nada (cabrón pesimista). Seguro que está pensando en su hija, novia...lo que sea, en Laniel. Ya le queda menos para la familia feliz, ahora tiene un gato llamado Mefistófeles (JA JA ¬¬) Aunque es posible que lo castre, si no me ayuda con lo que sabe de Laura. Ahora es el momento perfecto para acercarse a ella y sacarla de esa pesadilla, y que no vuelva a verme más. Para siempre.
El día que dijo Gabriel de dejar el cargo me pasó algo inusual. Ocurrió cuando Diego quiso dejar de "meter presión" según dijo él, mientras intentaba quedarse en un segundo plano del debate. Me descubrí...no sé explicarlo, casi como desconfiando de él. Es decir ¿Sabemos algo realmente de Diego? Aún no sé qué es lo que le hace quedarse en este agujero, ni siquiera sé a qué se dedicaba. Creo que fue la primera vez en que dejé de mirar mi propia mierda y pensar en el pasado de los demás.

Me estoy desviando del tema. Finalmente aquel día acepté los galones, porque Gabriel tenía que descansar y dejar de comerse la cabeza. Cuando despertara y estuviera descansado y con la cabeza fría, le mostraría mis verdaderas intenciones de no querer el cargo para nada. Me arriesgo a que se cague en mis muertos, pero es posible que recapacite después de un buen descanso.
Al final, para mi desgracia, no fue exactamente así, pero creo que lo estamos consiguiendo (¡hasta el Gérmenes está colaborando sin saber apenas nada!).

Gabriel dice que no merece el cargo, que nos ha llevado a la ruina, pero nadie le dijo que los galones no hacen al líder. Yo no he seguido a unos galones con patas. He seguido a Gabriel no por lo que porta en sus hombros, eso es lo de menos. Él puede disfrazarse de lo que quiera que lo seguiré siguiendo. Porque el liderazgo se lleva en la sangre y no en los galones.



2 comentarios:

  1. Gracias a él seguimos vivos, e insiste en no verlo. Líder nato.

    Y tu cabrón pesimista quiere que te alejes de su pasado xD

    Un abrazote

    ResponderEliminar
  2. Normal que no te fíes de Diego xD.

    Pero es que nos estamos volviendo locos o qué????! (sí!)

    Gabriel, joder, él nos ha visto bien? xD

    ResponderEliminar