sábado, 12 de diciembre de 2009

Es fácil.

Si la suerte está de mi lado debería ser fácil. Entro con "Sako", mi mercancía, hacemos que no den un duro por Yumi, es fácil, lo único que tiene que hacer esa bruja es no hacer nada. Doy lo que tengo por ella, la rescato, vuelvo. Antes de saquen a Ayame al escenario escapará, se transformará en su forma alternativa haciendo que los grilletes se le queden grandes. Es fácil. Saliremos los tres y huiremos hasta nuestro asentamiento. El noble tendrá que cumplir su parte del trato. Ellas volverán al hogar de arriba y yo...bueno, eso no importa.

No creo que a nadie le importe. Ayame me odia y Yumi creo que no le caigo demasiado bien, para ser franco, ni lo he intentado, me dan escalofrios las brujas. Y por si quedaba alguna duda de que a Ayame me odiaba más allá de las tortas que me pega cuando la abrazo mientras duerme, he empezado a mantener las distancias con ella, mostrarme frío e incluso borde. Es fácil. Si me pegaba cuando me acercaba demasiado a ella ahora que me muestro indiferente y borde no sentirá ninguna pena si nos separamos. Hasta ahí todo claro, nadie me echará en falta. Ella está a salvo, que se lo merece porque de verdad me importa, aunque siempre la esté cagando ya que soy la torpeza viviente. Yo seguiré mi misión suicida. Es fácil.


...


Ayame...¿me acaba de abrazar?

Mierda. Se suponía que me odiaba. Se suponía que esto iba a ser fácil...

4 comentarios:

  1. Refleja los pensamientos de Ran, me gusta cómo ha quedado. Solo un detalle, tienes un anacronismo "un duro".

    A ver cómo se desarrollan los hechos ^^

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  2. Nunca nada es tan fácil.... Se supone...

    Mentirijillas desde mi reino;)

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